BARAHONA.- De ser una provincia tranquila y de gran convivencia familiar, Barahona se ha transformado en una comunidad violenta, donde ya resultan normales los asesinatos, atracos, robos, muertes por encargo y otros crímenes cada día, lo que el senador Eddy Mateo atribuye en gran medida al desempleo y a la falta de oportunidades para sus moradores.
Tras hacer el planteamiento, el congresista llamó al presidente Danilo Medina a que dinamice las obras paralizadas para crear puestos de trabajo y, particularmente, citó el caso de los caminos vecinales y, sobre todo, el atraso en la construcción de la presa de Monte Grande.
Dijo que los campesinos no tienen acceso fácil a los mercados porque no cuentan con caminos para acarrear sus productos.
Recordó que Barahona se ha vendido como gran potencial para el turismo, pero la violencia causa serios problemas y perjudica esa promoción.
Urge, dijo, crear empleos para las personas que están en edad productiva, a fin de contrarrestar la violencia, además de aplicar la ley a los culpables.