Luis Vargas: Prevenir más, para perseguir menos...


República Dominicana posee uno de los mayores índices de delincuencia de Centro América, así lo reflejan diversos estudios, entre ellos los datos divulgados por la firma CID GALLUP recogidos en publicación hecha por Listín Diario el pasado 20 de marzo del 2016. Año tras año vemos como las cifras de violencia de género aumentan, pese a los esfuerzos de prevención que desarrollan instituciones tanto públicas como privadas y la participación de la sociedad civil por erradicar este flagelo. 

La sociedad esta involucionando en este sentido y son lamentables los repetitivos y diversos casos de violencia que llena de luto de manera sistemática a todas y cada una de las familias dominicanas. ¡Esto es alarmante!

Un país que exhibe grandes avances pero aun considerables niveles de analfabetismo, con un desarrollo económico evidente, pero que no armoniza con muchas de las problemáticas sociales y que aún se traduce en pocas oportunidades y desempleo... debemos despertar.

Debemos despertar del estado de tolerancia que hemos desarrollado ante los hechos delincuenciales, del contubernio que emana de nuestro silencio y nos involucra por nuestra apatía, como padrinos de lo mal hecho. Ya otros pueblos latinoamericanos están dando pasos contundentes en ese sentido y los dominicanos reunimos las condiciones para sumarnos.

Podemos alivianar la carga laboral que desempeña nuestro ministerio público, podemos tomar cartas en los asuntos comunitarios que proyectan inconductas que degeneran en hechos lamentables, podemos colaborar de manera más activa con las autoridades para que las desgracias no ocurran y así no tener que perseguir a individuos que al ser puestos a disposición de la justicia, esta los trata con la prudencia que demandan los sistemas penales y derechos humanos actuales.

Pero las autoridades deben ser garantes de esa colaboración, debemos sustituir el miedo, la inseguridad y la incertidumbre que agobia a una madre cuando es maltratada por su pareja. Debemos transformar la mentalidad de los vecinos y hacerlos capaces de unirse en la construcción de entornos seguros para las familias.

Por tradición, "Lo malo hace más ruido que lo bueno", pero las dominicanas y dominicanos somos gente grandiosa con ganas increíbles de ver cambiar nuestra realidad, lo hemos logrado en otras épocas y esta no será la excepción, vamos a prevenir más la delincuencia y así no tener que perseguir tanto la criminalidad.

Por Luis Vargas 




Artículo Anterior Artículo Siguiente

Consentimiento de cookies

Este sitio web utiliza cookies para ofrecerle una mejor experiencia de navegación. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta el uso de Cookies

Más información