“Las uniones tempranas son una violación grave a los derechos humanos y al don de la vida, independientemente de que se trate de un niño o una niña. Estos escenarios se prestan para la explotación y el abuso sexual sistemático contra niñas y adolescentes”, afirmó el Ministro de Relaciones Exteriores en una rueda de prensa encabezada por el Presidente Luis Abinader en el Palacio Nacional.
Álvarez destacó que República Dominicana aceptó libremente una responsabilidad frente a la comunidad internacional, a través de las firmas que ha colocado en los diversos instrumentos internacionales sobre derechos humanos y que los niños, niñas y adolescentes de nuestro país merecen que finalmente se cumpla con ellos, asumiendo nuestros compromisos ya.
“Ninguna sociedad puede aspirar a un desarrollo humano pleno y armonioso mientras persistan en su seno el lastre que son las perniciosas uniones tempranas de menores”, enfatizó el diplomático.
El canciller expresó que este es un tema de suma importancia en materia de derechos humanos, el cual merece nuestra máxima atención y que el liderazgo nacional se aboque a proscribir en nuestro país de una vez por todas.
El Ministro de Relaciones Exteriores mencionó como el más trascendental de todos los instrumentos internacionales firmados por nuestro país, La Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, fundamento que norma la convivencia de toda nación que aspira pertenecer al mundo civilizado.
Por otro lado, recordó que en el marco de la Organización de Estados Americanos, firmamos la Convención Americana sobre Derechos Humanos de 1969, cuyo artículo 19, sobre los “Derechos del Niño”, señala que: “Todo niño tiene derecho a las medidas de protección que su condición de menor requiere por parte de su familia, de la sociedad y del Estado”.
También trajo a la memoria que en 1979 fue adoptada la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer, la cual estableció en su artículo 16 (2): “No tendrán ningún efecto jurídico los esponsales y el matrimonio de niños y se adoptarán todas las medidas necesarias, incluso de carácter legislativo, para fijar una edad mínima para la celebración del matrimonio y hacer obligatoria la inscripción del matrimonio en un registro oficial”.
Además, explicó que el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer ha propuesto en una Recomendación General que la edad mínima para contraer matrimonio se fije en los 18 años.
De igual forma, se refirió a la Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, que garantiza y protege el desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social de los niños.
A nivel local, Roberto Álvarez destacó que la Constitución dominicana establece en su artículo 5 que el principio fundamental en que se basa nuestra Carta fundamental es la dignidad humana y en su artículo 56 declara del más alto interés nacional la protección de los niños, niñas y adolescentes.